Facts: Seen and Unseen/es
From Gospel Translations
Jesucristo murió. Fue enterrado. Resucitó al tercer día. Fue visto por muchos testigos diversos.
Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras;y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras; y que apareció a Cefas, y después a los doce. Después apareció a más de quinientos hermanos a la vez, de los cuales muchos viven aún, y otros ya duermen. Después apareció a Jacobo; después a todos los apóstoles; (1 Corintios 15:3-7, (Reina-Valera 1960)
Cuando la Biblia dice: "porque por fe andamos, no por vista" (2 Corintios 5:7), no significa que nunca ha habido evidencias visibles. Tampoco significa que no existen evidencias visibles hoy.
Los cielos cuentan la gloria de Dios (¡hoy!). Y el firmamento anuncia la obra de sus manos (Salmo 19:1) Desde la creación del mundo [¡incluso hasta el día de hoy!] “… las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas. (Romanos 1:20)
Con la primera generación de creyentes, Dios no pensó que estuviera contradiciendo las bases de la fe dándoles apariciones visibles del Cristo resucitado, y tampoco posteriormente, al confirmarles la palabra de verdad con señales y maravillas.
A [los apóstoles] también se les presentó a sí mismo con vida después de sus sufrimientos por medio de muchas pruebas convincentes, apareciéndoseles a ellos en un plazo de cuarenta días y hablándoles de las cosas pertinentes al reino de Dios. (Hechos 1:3) Después que [nuestra gran salvación] fue comunicada a través del Señor, se nos confirmó por medio de aquellos que escucharon, Dios dando testimonio a traves de ellos, tanto por señales como por maravillas. (Hebreos 2:3-4)
Entonces, ¿qué quiere decir Pablo cuando dice: " por fe andamos, no por vista "? Como es usual, el contexto es la clave para entender esto.
Porque asimismo los que estamos en este tabernáculo [esto es el cuerpo] gemimos con angustia…[anhelando] que lo mortal sea absorbido por la vida. Mas el que nos hizo para esto mismo es Dios, quien nos ha dado las arras del Espíritu. Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo que entre tanto que estamos en el cuerpo, estamos ausentes del Señor (porque por fe andamos, no por vista). (2 Corintios 5:4-7)
Sí, Cristo fue visto una vez con los ojos físicos. Sí, él hizo señales y prodigios infaliblemente con una sola palabra o con un solo toque de su cuerpo. Sí, él murió y resucitó, y apareció a muchos. Pero AHORA él ha desaparecido de la vista. No podemos verlo de esa manera ahora. Como dice Pablo, "[Cuando estamos] presentes en el cuerpo, [estamos] ausentes del Señor!" Es decir, no lo vemos a él ahora. No sólo eso, sino que en este cuerpo nuestro gemimos. Es decir, no podemos ver el efecto completo de su poder en nuestras vidas ahora. Más bien, Pablo dice, tenemos su Espíritu como una promesa. El Espíritu es una garantia invisible que experimentamos como un anticipo de la vision de Cristo en su gloria.
Así pues, ¿en qué sentido entonces caminamos por fe y no por vista? Caminamos por fe y no por vista sobre la base de los actos visibles de Dios en Cristo en el pasado y sobre el testimonio convincente que los apostoles dieron de esos actos. Confiamos en este Cristo viviente y en sus promesas para nosotros a pesar de que ahora no lo vemos. Pablo lo dice así en Romanos 8:24-25: "Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo? Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos.”
Pedro lo expresa de la siguiente manera: "a quien amáis sin haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora no lo veáis, os alegráis con gozo inefable y glorioso" (1 Pedro 1:8) . Nunca he visto a Cristo resucitado en la carne. Sin embargo, su Espíritu me ha permitido ver su gloria a traves de sus testigos en la Biblia. El Cristo que veo allí, ha ganado mi mente y mi corazón. Así que puedo decir con Pablo en Gálatas 2:20, "ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe [no por vista] del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.”
Andando fe (por ahora) con usted,
El Pastor John